La ortodoncia es una especialidad de la odontología que se encarga de la corrección de los dientes y huesos posicionados incorrectamente.
Los dientes en mala posición y los que no muerden correctamente unos contra otro son difíciles de mantener limpios, corren riesgos de pérdida precoz debido a caries y enfermedades periodontales, y ocasionan una tensión extra sobre los músculos de la masticación que puede generar dolores de cabeza, síndrome de ATM y dolores varios en cuello, hombros y espalda. Además, los dientes girados o posicionados incorrectamente desmerecen nuestro aspecto.
Los tratamientos ortodóncicos tienen la ventaja de proporcionarnos una boca sana, una sonrisa de aspecto agradable y dientes con mayores posibilidades de durar toda la vida.
Con anterioridad al inicio del tratamiento de ortodoncia es necesario, habitualmente, realizar un estudio de cada caso para poder hacer un correcto diagnóstico de la maloclusión y del estado oral. Ello nos ayudará a proponer el plan de tratamiento más idóneo. Las pruebas más habituales necesarias para el estudio son las siguientes.
La ortopantomografía es una radiografía panorámica frontal donde observamos la totalidad de las estructuras orales (piezas dentales, sus raíces y el nivel óseo, entre muchos otros muchos aspectos) que se realiza en un aparato específico denominado ortopantomógrafo. Esta técnica permite el estudio simultaneo y comparativo de ambas articulaciones, las ramas ascendentes y la totalidad de las arcadas alveolodentales.
La ortopantomografía está indicada en una gran cantidad de situaciones en patología oral y maxilofacial, suponiendo una herramienta diagnóstica de primer orden.
La teleradiografía consiste en una radiografía lateral del cráneo con la que se estudia la forma y crecimiento de los huesos, la posición de los dientes y los tejidos blandos. El dentista realiza unas mediciones de ángulos y distancias entre diversos puntos del cráneo, siendo su objetivo el conocer diversos aspectos, como la relación maxilar superior con la mandíbula inferior, la posición de los dientes en los maxilares y la relación de los maxilares con el resto del cráneo, entre otros aspectos. Con esta radiografía también podemos observar las vías aéreas, las amígdalas y las vegetaciones.
Resulta de gran utilidad en ortodoncia, ya que sin ella no podríamos realizar un correcto diagnóstico ortodóntico ni el plan de tratamiento a seguir. Sobre esta radiografía se realiza el estudio cefalométrico.
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¡ Para que deslumbres con una sonrisa sana y bonita ! 
