Con el paso del tiempo, el ratoncito Pérez y toda el aura de ilusión que rodeaba el momento en el que a un niño le caía un diente se acaba y por desgracia, conforme vamos creciendo, el miedo acompaña a todo lo que tenga que ver con dientes y especialmente con los dentistas.
Es frecuente, que al final de la adolescencia, las muelas del juicio den señales de vida, es decir , empiezan a molestar tanto en el lugar en el que van a salir como en las zonas próximas, provocan cambios de posición en los dientes anteriores por falta de espacio al erupcionar,… En no pocas ocasiones las muelas no tienen sitio suficiente para salir o están mal colocadas, es por ello que en todos aquellos pacientes en los que mantener las mismas sea perjudicial para conservar un buen estado de salud, recomendemos su extracción.
Antes de cualquier intervención, es imprescindible realizar las pruebas diagnósticas que sean necesarias, entre las que se incluyen radiografías periapicales, ortopantomografía e incluso en ocasiones un TAC, para saber la posición exacta del molar y de los nervios que lo acompañan y así abordar la extracción con mayor precisión. Tras la intervención, el paciente deberá seguir los consejos que se le den en clínica, para recuperarse en el menor tiempo posible, así como un reposo relativo.
En Aller Miró Clínica Dental somos especialistas en este proceso. Estamos en Alcoy, contacta con nosotros y te atenderemos encantados.